miércoles, abril 26, 2006

La remontada

Marzo tuvo grandes discos. El estupendo rock'n'gospel de Howe Gelb, el fabuloso hip-hop de Ghostface Killah y la vuelta a primera línea del gran Dominique A .
Pero quien se ha llevado el gato al agua ha sido el joven Nathan Fake con los líricos y evocadores paisajes electrónicos de su disco debut.

Nathan Fake - Drowning in a Sea of Love
[Border Community, 2006]

Es un disco que vence por su sencilla calidez, por lo naturales que resultan los recursos melódicos y por lo fácilmente disfrutable de su escucha.
Es una electrónica que podría recordar el sonido de M83, que parece ya un referente persistente para toda una troupe de nuevos artistas; pero menos épico y ampuloso y sí más ambiental y, sobre todo, melódico.
Y ahí está el que es para mí el gran acierto distintivo y lo que me ha atrapado del disco, es que toda la experimentación está al servicio de intentar construir una suerte de canciones ambient-pop que resultan sumamente irresistibles.

Nathan Fake - Long sunny